checo
el checo es mi hermano mayor. durante los días de niñez fue mi "manito" y era yo una lapa: quería estar dónde él se encontraba y hacía tremendos berrinches si no iba con él a sus paseos o chocoaventuras. siempre le hice pasar las de caín y más de alguna vergüenza con todo mundo (¡ya se mio tu hermano!) :"> entre los normales trompos de niñez y las aventuras compartidas, pasaron algo así como 11 años y yo me fui al internado y despúes el se quedó en el D.F. y yo en Querétaro. Ahí se fue diluyendo el gusto compartido y las mutuas necesidades.
Pasaron los años y yo regresé a la ciudad de México y él se fue a Guadalajara. Desde entonces (creo que desde antes), nuestras pláticas fueron más superficiales y poco a poco, nos fuimos desconociendo. Nuestros gustos y necesidades e ideas del mundo, evolucionaron en forma muy divergente y ahora, casi no tenemos muchos puntos en común.
En diciembre-enero pasados, tuve la graciosa pendejada de darle un manazo a su hijo (el que se ve en la foto). Amén del rencor que esto le produjo, en diciembre no pude verlo cuando llegaba a la ciudad en reunión de trabajo.
Desde hace unos días, tengo una discusión epistolar con él. Entre filípicas me reprende (lo he clasificado como "complejo de patriarca", que al parecer sufrimos todos los que tenemos algún hermano menor) y entre devaneos me defiendo (no mucho, ya he aprendido de macutena que la mejor defensa es acceptar las visiones de los demás y no convencerlos de la nuestra).
La familia...
Pasaron los años y yo regresé a la ciudad de México y él se fue a Guadalajara. Desde entonces (creo que desde antes), nuestras pláticas fueron más superficiales y poco a poco, nos fuimos desconociendo. Nuestros gustos y necesidades e ideas del mundo, evolucionaron en forma muy divergente y ahora, casi no tenemos muchos puntos en común.
En diciembre-enero pasados, tuve la graciosa pendejada de darle un manazo a su hijo (el que se ve en la foto). Amén del rencor que esto le produjo, en diciembre no pude verlo cuando llegaba a la ciudad en reunión de trabajo.
Desde hace unos días, tengo una discusión epistolar con él. Entre filípicas me reprende (lo he clasificado como "complejo de patriarca", que al parecer sufrimos todos los que tenemos algún hermano menor) y entre devaneos me defiendo (no mucho, ya he aprendido de macutena que la mejor defensa es acceptar las visiones de los demás y no convencerlos de la nuestra).
La familia...
3 comentarios
Anónimo -
tenteenelaire -
Anónimo -